Un reciente posteo del abogado querellante Alfredo Aydar volvió a encender el debate sobre la independencia judicial en Catamarca. En su mensaje en redes sociales, el letrado deslizó dudas respecto del accionar de un fiscal federal, al que se lo vincula con simpatías hacia el espacio libertario y, en particular, con la figura de Karina Milei.
“¿Alguien sabe algo de un fiscal federal de Catamarca que sería libertario, que tendría en su casa un semejante cuadro de Karina Milei? Y que habría actuado con los ‘libertos’ para que jamás nos dieran respuestas en el gobierno nacional por el escándalo de las estafas en Catamarca”, escribió Aydar, en alusión a las causas que patrocina en representación de decenas de damnificados.
Según trascendió en testimonios de algunos de sus clientes, las dificultades que enfrentó la querella para llegar a funcionarios nacionales con sus reclamos podrían explicarse por la supuesta cercanía política de este fiscal con las filas libertarias. Incluso, circula la versión de que en la residencia del funcionario habría un cuadro con la imagen de Karina Milei, lo que en ciertos ámbitos locales le valió el apodo de “El Libertario”.
Más allá de las especulaciones, la publicación de Aydar reaviva un interrogante de fondo: ¿hasta qué punto las afinidades políticas de quienes integran la justicia federal pueden condicionar investigaciones de alto impacto social, como las derivadas de las estafas denunciadas en Catamarca?
Sin embargo, el tema ya comenzó a generar ruido tanto en los tribunales como en la arena política, en un contexto donde la relación entre poder, justicia y transparencia vuelve a quedar bajo la lupa.
Fuente: San Fernando Digital


